domingo, 31 de diciembre de 2006

Vetos


Raúl Cantin, el primer veto.

Cuando la administración Roquel sucumbió sin dar pelea a la prepotencia impúdica de la tropa conducida en el campo de batalla por el concejal Gómez y anunciada en el saqueo que llevaron adelante el tandem Aburto-Villafañe, el punto de encuentro y equilibrio se encontró en el presidente del concejo.
Cantín anunció a su familia la segura postulación a la intendencia, reforzada por la decisión de dar la pelea interna a un okupa que relamía heridas en una habitación de su refugio galleguense.
“Chiquito” Arnold todavía soñaba con convencer a Kirchner de abrir la Ley de Lemas para el juego grande y lo imaginaba a Cantín como la pata galleguense de su fórmula, como Vice o como Intendente.
Más allá de sus bondades o deméritos como candidato, lo importante de Cantín está en las sombras,
Y en las sombras esta el que puede aportar los monederos pesados para una campaña que sobrepase a la del aparato K.
Báez, de los Gotti aprendió, que las manos deben ir a los bolsillos con todos los candidatos con posibilidades, después de todo, serán ellos quienes les abran las puertas a los grandes negocios de las licitaciones.
La relación familiar de Lázaro Báez esta reforzada por la pareja estrella de la constructora y sus derivaciones, Fernando Butti y Andrea Daniela Cantín, la hija del candidato.
El matrimonio controla las cuentas de Austral y pone su nombre a algunas empresas del conglomerado Báez.
Por su intermedio Cantín supo que si jugaba por afuera de la estructura ningún cobre llegaría al jefe de finanzas de la campaña y la orden provenía de Kirchner.
Y así Arnold reconoció, que el beso propinado al Presidente cuando Acevedo se batía en retirada, tenía el mismo sabor y el mismo valor que los entregados en tantas noches furtivas, cargadas de promesas a un amor pagado.
El candidato a Intendente prefirió el calor de la pesada estructura del amo del feudo y ahora debe pensar en como va a justificar que una hipotética administración Cantín no favorecerá, aún más, a sus familiares proveedores del Estado.

miércoles, 27 de diciembre de 2006

A manos llenas





Transitar 15 años en el poder, gozando de impunidad absoluta, deja secuelas.

Las mutaciones son demasiado visibles para quienes caminan por otros senderos, sin perder de vista el contexto.

Raúl Horacio Copetti, cordobés, casado y separado con Silvia Esteban, cordobesa, fueron padres de Pablo Sebastian y Yanina.

Los chicos estudiaron en el Colegio Ladvocat y se fueron a cursar sus carreras a otras provincias.

Raúl y Silvia ataron su suerte a Néstor Kirchner, penaron en las derrotas iniciales pero la buena fortuna llegó.

Raúl no soportó el habitual maltrato de K a sus secretarios y se alejó a una Dirección provincial mas tranquila, Silvia se erigió en Presidenta del Consejo Provincial de Educación.

Raúl manejaba las cuentas sin control del FVS, Silvia fue aplaudidora de discursos en la eterna campaña de K, justificadora de anuncios de ilusión que salían de la galera gubernamental y de la versión lupinera de la Ley Federal que condenó a miles de chicos al fracaso pedagógico.

Raúl entraba y salía de la cuenta al son de los desbordes de algún amanuense que se birlaba un cheque de la corona para gastos personales, una recuperación de firma autorizada fue producto de la publicación de las cuentas en dólares de K y Rudy Ulloa en la revista "Malón", cuando debió llamar a Don Eskenazi que gozaba de un crucero caribeño para que justificara la filtración y cesanteara empleados infieles al boleo.

Silvia partió con el fracaso a cuestas a una banca de Diputada Nacional, Raúl padeció sus errores durante la gestión Acevedo.

Con el golpe de Estado, que revirtió el poder a sus dueños, Sancho lo designó en el Instituto Provincial de Seguros, para que pagara, con tiras, los estipendios de las marchas a Buenos Aires cuando lo pedía el jefe.

Silvia volvió a Educación, vendiendo ahora, las bondades de la Ley Filmus.

Sus hijos crecieron.

Pablo Sebastián se recibió en Córdoba de Licenciado en Publicidad, con los aportes familiares comenzó la empresa Punto Com y luego se dedicó al nicho comercial de los Spa.

Imago Spa, fue el comienzo, la sociedad con su padre Raúl fue inscripta en diciembre de 2004, bajo el nombre de Emprendimientos Turísticos Patagonia SA, en la capital mediterránea.

Pablo y Yanina inscribieron, además, una empresa que lleva sus iniciales, como cualquier kiosco de pueblo, pero con una posibilidad de re-lectura originada, quizás, en sentimientos de culpa ajena y conocimientos del peso de las palabras.

En Córdoba, en el Abril de 2005, inscribieron YAPA SA, con un capital social de $ 100.000, para dedicarse a negocios inmobiliarios y financieros.

Pero con un inversor de confianza como su propio padre, Pablo se animó al gran salto y puso la plata grande y verde en un hotel boutique y spa en El Calafate.

La estructura de Imago Hotel & Spa es impresionante, por dimensiones y belleza, pensar en costos remite a millones, muchos para quien llegó como administrativo de una constructora y luego fue empleado público de sueldo estrecho.

Imago se presentó a la gran prensa nacional especializada inaugurando oficinas de representación en calle Bartolomé Mitre 777, 7º piso "C", con el ex British Airways, ex American Airlines, Paul Margenet como representante y la ex Four Seasons Cinthya Nalli como ejecutiva de ventas.

Imago lleva la categoría Spa a niveles altísimos y le agrega un restaurante como Cícero Bistró con el cheff Gastón Diez, para que los pudientes turistas gasten sus euros con ganas.

Transitar quince años en el poder, con impunidad garantizada, deja secuelas.
En zoología Imago es el insecto adulto que surge tras la metamorfósis, en psicología, la persona ideal que tiene como referencia al progenitor de sexo contrario.

martes, 26 de diciembre de 2006

fruto de su vientre soy


A 30 años del golpe genocida, mi vieja habla en el acto donde se inaugura un monumento que recuerda a muertos, desaparecidos y presos de la dictadura.
Las caras que la rodean muestran que la vieja sigue siendo tan dura como siempre.

lunes, 4 de diciembre de 2006

Juan Arancio


Nadie como él dibujando o pintando las islas y sus habitantes.
Los rostros de los niños de Alto Verde o de las márgenes del Salado son las de todos los niños que crecen entre el barro, los sauces, el agua y la miseria.